El Atlas de las Nubes de David Mitchell

Un amigo mío se pasó medio curso alabando a David Mitchell y para las vacaciones me prestó Mil Otoños y El Atlas de las Nubes (a cambio de Los restos del día  y Nunca me abandones de Ishiguro). En julio leí y reseñé Mil Otoños. Decidí no empezar por El Atlas de las Nubes ya que su trama me atraía más que las andanzas de Jacob de Zoet.

Creo que es imposible ofrecer un resumen de ésta novela sin desvelar parte importante de su trama o estropear una de las razones por la cuál he disfrutado éste libro que es descubrir qué une a seis historias tan distintas.

Edición española, 

publicada por Tropismos, con un

diseño no muy atrayente...

En efecto, la novela transcurre en seis sitios distintos y momentos que aparentemente no tienen nada en común. La primera se trata del diario de Adam Eweing que viaja a casa en un barco atravesando el Pacífico. La segunda son las cartas de Robert Frobisher, un músico cuyo comportamiento disoluto y escandaloso le ha causado ser desheredado y expulsado del seno de su familia y busca refugio en casa de un famoso y viejo compositor como su amanuense. La tercera es la historia de la periodista Luisa Rey que, por un accidente, se encuentra con el scoop que puede cambiar su vida, o acabarla. La cuarta narra las aventuras de Timothy Cavendish un viejo editor a quién encierran en un asilo de ancianos en contra de su voluntad. La quina historia trata del interrogatorio de Sonmi~451, una fabricante que ha transgredido todas las normas de la "corporocracia". En la sexta y última parte, Zachry cuenta la historia de cuando conoció a Meronym, una Prescient que vino a alojarse en su pueblo durante seis meses. 

Cada historia está muy bien construida, con una trama interesante que el autor sabe perfectamente en qué momento debe cortar. Los géneros son bastante diversos – de ficción histórica a policíaca –, pero todas tienen su interés. A mí me gustó en especial la historia de Frobisher, pero debo admitir que las historias situadas en el futuro son tremendamente originales, con mucha acción y entretenidas. 

Como podéis ver éstas historias no parecen tener ningún nexo que las una pero, poco a poco, el lector va conociendo detalles que reaparecen en las historias, como ecos de antiguas vidas. Por ejemplo, en todas las historias hay una referencia directa a la historia anterior. Algunas son cartas encontradas, otros libros, e incluso películas. Pero, entonces, ¿cuáles son reales y cuáles no? Mitchell cuestiona qué es real dentro de una novela, que en realidad no es nada más si no ficción. Y eso trae muchos quebraderos de cabeza al lector, dando vueltas acerca de sí los sucesos descritos de verdad ocurrieron o no. Además, el autor consigue transmitir un sentido de realidad que, al menos a mí, me hizo buscar acerca de alguno de los personajes descritos, en especial el compositor. Creo que es increíble cuando una historia consigue quebrantar la fantasía que la separa de la realidad en la que se encuentra el lector.

Además, también hay pequeños elementos, ecos, que hacen referencia a las demás historias. En ocasiones son bastante difíciles de percibir y por eso creo que Cloud Atlas es uno de esos libros que se disfrutan aún más en una segunda lectura. En la primera lectura el lector está impaciente por llegar al desenlace, por continuar las historias que se han dejado a medias (y además no sabe qué historias le deparan en las próximas páginas), por lo que no es fácil darse cuenta de algunas referencias (a veces son mucho más que meros detalles). 

El libro también explota la idea de la reencarnación, en cierta forma. El mismo Mitchell dijo 

"Todos los personajes principales son reencarnaciones de la misma alma... identificados por una marca de nacimiento... La 'nube' se refiere a las siempre cambiantes manifestaciones del 'atlas', que es la fija naturaleza humana... El tema del libro es el ser depredador... los individuos depredan en individuos, grupos en grupos, naciones en naciones". (fuente)

Es justamente ésta última parte que más me interesó en el libro (y que también tardé en descubrir). El hecho de que haya una continuidad en el personaje principal me parece muy bonito y poético, pero fue el patrón de la naturaleza humana que se repite historia tras historia, de distintas formas, que me emocionó. ¿Por qué? Pues porque se ve justamente eso, como el hombre se aprovecha de sus semejantes, como la civilización Occidental da al hombre una sed de poder y riquezas que se reproducen en los personajes de la obra y cuyas acciones (o de las que son testigos y víctimas) tienen graves consecuencias en las siguientes historias. Fue esto, que tiene más protagonismo en la segunda parte de la novela, que me cautivó e hizo que El Atlas de las Nubes ganase mucho no sólo como novela si no como experiencia lectora. 

Casi me olvidaba, un detalle que me pareció muy interesante y muy trabajado por parte del autor es el del lenguaje. A lo largo del tiempo que discurre la novela (hay que tener en cuenta que empieza en el siglo XIX y llega hacia un futuro incierto) el lenguaje se modifica. Y eso me pareció fantástico y le añade mucho más realismo a la obra. De la misma forma que no se hablaba igual en el siglo XIX que en el XXI cabe esperar que en el futuro no hablen como ahora. Además, los cambios que introduce Mitchell en el idioma son un reflejo de la sociedad que existe en ese momento. Aunque esto pueda dificultar un poco la lectura le añade mucha más riqueza y complejidad.

Resumiendo, ¡leed Cloud Atlas! Es un libro sorprendente, con un ritmo que va in crescendo, unas historias maravillosas y unos personajes fantásticos cuyas palabras se quedan grabadas en el corazón. A mí me ha gustado muchísimo y, incluso después de haber pasado días desde que lo acabé, a veces me encuentro pensando en que quiero leer como continua (no, no hay segunda parte, pero mi cerebro quiere más), y es sin duda un libro que volveré a leer. Es realmente recomendable para cualquier amante de la literatura, la parte histórica está excelentemente documentada y la ciencia-ficción imaginativa pero sin proponer un escenario inverosímil. 

Además, en unos meses se estrenará su versión cinematográfica y el tráiler ya es impresionante.