Desde que leí Posesión a finales de 2011 que he ido buscando libro de A. S. Byatt. Primero fue El libro de los niños y ahora toca Ángeles e Insectos.
Se trata de dos novelas cortas situadas en la Inglaterra victoriana, un ambiente en el que la autora se mueve con soltura.
En el primero, Morpho Eugenia, Byatt escribe a través de la voz de William Adamson, un joven apasionado del mundo de los insectos, que ha pasado los útimos diez años de su vida en el Amazonas. En el camino de vuelta a casa su barco naufraga y con él todas sus posesiones, con lo que se encuentra sin blanca, sin posibilidad de ganarse la vida. Afortunadamente, uno de los hombres a quién enviaba especímenes del Amazonas, el señor Alabaster, se ofrece a acogerle en su casa y allí quedará prendado de su hija mayor, Eugenia.
El libro recorre los siguientes años de la vida de William, que, sin poder creer su suerte, logra desposarse con la bella Eugenia. Además de su historia, la novela contiene muchos otros "documentos", algo típico de Byatt, como un libro escrito por Adamson o unas fábulas sobre insectos. De hecho, gran parte del libro trata de las observaciones de Adamson sobre el mundo de los insectos y nos brinda incontables datos sobre el reino de las abejas y hormigas (entre otras) y sus distintas especies. Además, esto también da pie a discusiones más filosóficas, no sólo sobre la selección natural (la teoría de Darwin era muy discutida en aquella época) pero también sobre el determinismo. En realidad, todo lo que el protagonista observa en el comportamiento de, por ejemplo, las hormigas se puede poner en paralelo a lo que ocurre en su vida. Sin embargo él, un científico nato, es incapaz de verlo.
En general, aunque a veces se puede hacer algo denso, me entretuvo bastante esta historia, con las tribulaciones de William, incapaz de ver lo más obvio, y su desarrollo como personaje a lo largo de la novela.
El segundo es Conjugal Angel, que se adentra en el mundo del misticismo y prácticas espiritualistas en la Inglaterra de finales del siglo XIX. En ésta ocasión, el punto de vista va cambiando. Sea a través de Mrs. Papagay, una mujer que ha perdido a su marido en el mar, y tiene ciertas dotes para comunicarse con el más allá. O Sophy Sheekhy, una joven que es realmente una médium y puede comunicarse, ver y sentir, a los espíritus que vagan por la tierra. O de Mrs. Hearnshaw, una esposa que ha perdido a sus últimos cinco recién nacidos, y está desesperada por encontrar la respuesta a tanto sufrimiento. También leemos los pensamientos de Mrs. Jesse, una mujer ya madura, que vivió un corto pero intenso amor de joven, del que aún no ha podido recuperarse, y además, es hermana de Alfred Tennyson (que también aparece en la novela). De hecho, Emily Jesse (antes Emilia Tennyson), es un personaje que realmente existió. A través de su hermano conoció a otro poeta, Arthur Hallam, y en muy poco tiempo se comprometieron, nunca llegando a casarse debido a que Arthur murió, a los veintidós años.
Por esta razón, la historia está llena de poemas de no sólo Tennyson y Hallam, pero también de otros poetas románticos (con una suerte similar a la del joven Hallam), como John Keats. Aunque tenía una idea vaga de quién era Tennyson, nunca había llegado a leer ninguna de sus obras, y me han parecido bellísimas (además, es uno de los pocos Poetas Laureados del Reino Unido). Es algo que me encanta de los libros de la autora, es que siempre 'ganas' algo mucho más que leer una historia, te enriquece con conocimiento.
Me interesaron mucho las concepciones y opiniones de los personajes victorianos – que Byatt tan meticulosamente retrata en su moral, sus miedos y prejuicios – sobre, no sólo la muerte y lo que puede haber tras ella, si no también sobre los espíritus, sobre las prácticas para comunicarse con ellos, y como encajaba todo esto en un mundo tan... encorsetado.
En fin, cada vez tengo más la sensación de que Byatt es una de esas escritoras que te gusta o la odias, raramente existe un término medio. Así que no sé si recomendaros el libro o no, todo depende de como os llevéis con la autora. Afortunadamente para mí, parece que no tengo problema en leer su prosa, y de hecho me gusta, he llegado a acostumbrarme a su forma de escribir y de introducir "extras" en sus novelas, como poesías (¡y además descubres autores nuevos!). Además, siempre disfruto con la ficción histórica, sobretodo si está tan bien documentada como esta.
Pues no pinta nada mal... no lo conocía. Me lo llevo apuntado =)
ResponderEliminarBesotes
Me sirvio de gran ayuda muchas gracias
ResponderEliminarPues ami me gusto de como william Adamson se apasiona por los insectos.