¡Feliz Sant Jordi!
De nuevo estamos en mi día favorito del año, y además hoy está haciendo mucho sol y muchísimo calor, incluso para Barcelona. Como siempre, he salido por la mañana ya que, si a las 12 cuesta pasear por las Ramblas, por la tarde tienes menos espacio vital que en un concierto.
Como siempre, primero fui a mi adorada Hibernian, pero esta vez no tuve tanta suerte como hace unas semanas, y sólo encontré Soul (Alma) de Andrei Platonov (aunque, para ser sinceros, llevaba mucho tiempo buscando este libro). Luego ya fui paseando por Passeig de Gràcia y Rambla Catalunya, pero por poco tiempo porque era realmente agobiante. Por las calles de al lado también eran muy agradables, y habían bastantes puestos dónde también vendían libros de segunda mano.
He intentado salirme de mi tendencia de comprar demasiados libros en inglés, y lo he conseguido, ¡a ver qué os parecen!
Esta tarde me volveré a poner al estudio...
Estos dos libros me los regalaron mi hermana y su marido hace unos días, así que diremos que entran en el lote de Sant Jordi. |
- El Buen Soldado de Ford Madox Ford. Hace dos veranos leí El final del desfile, que tampoco me gustó tanto, pero alguien de quién me fío mucho no ha parado de insistir en que lea este libro, que es una obra maestra. Además, la edición que me he comprado es preciosa, con los bordes dorados y todo. Este libro trata de la vida de dos matrimonios ricos y ociosos cuyas vacuas existencias están llenas de egoísmo, celos, y deseo. Con unos personajes brillantes y un narrador más retorcido y poco fiable desde Iago en Othello, este cuento es la trago-comedia de dos personajes que no son lo que parecen, y que tienen su merecido. Y, como observa el autor, esta gente puede ocasionar daños terribles a gente inocente a su paso.
- La Nausea de Jean-Paul Sartre. Sí, era un filósofo, sí, este libro tiene pinta de ser deprimente. Pero es el representante de una corriente de pensamiento, y tengo curiosidad por leerlo. Después de haber pasado unos años viajando, Antoine Roquentin, hombre de treinta años que disfruta de una modesta renta, se halla instalado en la ciudad portuaria de Bouville dedicado a escribir un libro sobre un turbio aristócrata del siglo XVIII. Sin embargo, un día se ve asaltado por una sensación desconocida, la Náusea, cuya revelación como el sentimiento radical de la contingencia y la soledad del ser humano cambiará por completo su vida de sentido. Publicada en 1938, "La naúsea" de Jean-Paul Sartre es, junto con "El extranjero" de Albert Camus, la novela que encarna de forma más emblemática la corriente de pensamiento existencialista fruto de la atroz experiencia de la Primera Guerra Mundial y sus funestas consecuencias.
- Por el camino de Swann de Marcel Proust. Otro clásico francés que hasta hace poco no tenía ningunas ganas de leer porque el nombre de la saga "En busca del tiempo perdido" parecía indicar que era, efectivamente, una pérdida de tiempo. He buscado y buscado y en ningún sitio, ni en la contraportada de mi libro, he encontrado un resumen.
- Alma de Andrei Platonov. Es uno de estos libros que añadí hace siglos en mi wishlist de Goodreads, y ya ni me acuerdo de por qué. Pero hace mucho que lo buscaba y, aunque la portada sea fea con ganas, tiene buena pinta. El protagonista de esta novela nació en Asia Central, pero fue enviado a Moscú para su educación. Al alcanzar la edad adulta le envían de vuelta a su ciudad natal: creyendo que su gente está perdida en el desierto, va convencido a 'rescatarlos' y a llevarlos hacia el comunismo. Su misión se convierte en una búsqueda de la felicidad, pero su éxito está limitado. Su gente tienen sus propias ideas de qué quieren hacer con sus vidas. El protagonista se encuentras perdida, vulnerable y, a la vez que les intenta liberar del poder establecido, él mismo puede convertirse en opresor.
- Los pazos de Ulloa de Emilia Pardo Bazán. Ya era hora de que leyera algo más de literatura nacional, y justamente por esto ahora estoy leyendo a Rafael Chirbes, pero un clásico no hace daño. Quise encontrar Los santos inocentes de Miguel Delibes, pero no ha habido suerte. La novela se sitúa en un recóndito y salvaje paraje de Galicia. La llegada a esta localidad de Julián, un sacerdote delicado y sensible, tendrá imprevistas consecuencias. El marqués de Ulloa, rudo y pasional, se ve obligado a contraer matrimonio con Nucha, una señorita de ciudad para quien el ambiente de los pazos es una pesadilla.
- La caída del museo británico de David Lodge. Este es un regalo de mi hermana, y no sabía ni de la existencia del escritor hasta ahora. Por lo que veo es un libro bastante cómico, un género en el que no he entrado mucho, a ver qué pasa... Adam Appleby está casado con Barbara y, como son católicos practicantes, militantes y recalcitrantes, rechazan los métodos anticonceptivos no aprobados por la Santa Madre Iglesia y optan por combinar la abstinencia y el método de la temperatura basal. Pero como la carne es tan débil y falible es el trasnochado método, Apple
- l protagonista, Hayri Irdal, nos cuenta su larga vida, llena de vicisitudes familiares y personales, desde el sultanato de Abdülhamit hasta bien avanzada la República pasando por la Primera Guerra Mundial. El instituto para la sincronización de los relojes es una novela de una riqueza inagotable, que nos relata con fina ironía las dificultades de un hombre para adaptarse a su tiempo y, más concretamente, a los tiempos modernos.
Os diría que esto es todo, pero mucho me temo que en unos días habrá otra entrada de este tipo, porque no he podido resistirme y he pedido libros en Amazon....
¿Os habéis comprado algún libro? ¿Qué os parecen estos?
¡Feliz Sant Jordi!
Hola^^
ResponderEliminarDisfruta de los libros y feliz Sant Jordi!
besos
Veo que tienes unos cuantos clásicos "to catch up with". No me sorprende que no encuentres resumen de Proust- es difícil resumir este clásico de la literatura universal, no sólo francesa. Recomiendo unas madalenas para acompañar y espero tu reseña. Sartre me da un repelús por sus opiniones políticas de estalinista empedrenido de los que vivieron en lujo a sueldo de la URSS y KGB, aunque clásico también es, jeje. Creo que de toda la lista lo que más me apetecería es David Lodge- puede ser muy divertido, vamos, ya lo es el título del libro que tienes en clara alusión a la canción infantil "London Bridge is Falling Down" - "British Museum is Falling Down". A Ahmet Tanipar no lo conocía y me lo apunto porque parece muy interesante. Si quieres leer más autores turcos, te recomiendo a Elif Shafak ("La bastarda de Estambul", "El fruto de honor"). Saludos y ¡qué lo disfrutes!
ResponderEliminarCasualidad que ahora estoy leyendo "Por el camino del Swann" y me está encantando, hoy me he comprado la segunda parte. Es muy descriptivo, busca volver mediante recuerdos a ese tiempo perdido... no sé, siento que es una historia a la que le tienes que dedicar tiempo y estar en ese estado de querer dárselo y disfrutarlo.
ResponderEliminarDel resto, hace tiempo que quiero leer a Emilia Pardo Bazán, y con Ford Madox Ford tengo una relación complicada.
Saludos y feliz día :)
Disfruta de los libros!
ResponderEliminarFeliz Sant Jordi!
Besotes
Te has hecho con una buena colección! yo de Delibes sólo leí El hereje, que me gustó muchísimo, ahora que me lo recuerdas me lo apunto para leer algo más. Tengo curiosidad por el de Proust, esperaré la reseña a ver que nos cuentas!
ResponderEliminarBesos
Hola Teresa.Espero que hayas disfrutado del día de San Jordi.De los que mencionas en la entrada tengo La nausea,Por el camino de Swann,y Los pazos de Ulloa.Te recomiendo vivamente "Los santos inocentes" de Delibes.Es junto a "Las ratas" la mejor novela que he leído de él."En la orilla"-que es la que estás leyendo de Chirbes-es de las mejores obras en español que he leído en lo que va de siglo.Pero Rafael tiene incluso otra mejor:"Crematorio".
ResponderEliminarPor San Jordi he comprado "Limónov"de E.Carrere,"Nostromo"de J.Conrad,"Pigmalión"de G.B.Shaw,"La piel del cielo de E. Poniatowska y "Breve historia de todas las cosas"de Ken Wilber.
No abandones nunca este maravilloso blog.Tus suscriptores te lo agrademos de corazón.
Un fuerte abrazo