26 sept 2013

Las hermanas Makioka de Junichiro Tanizaki

En este caso como en otros, las portadas inglesas son mucho más bonitas que las españolas.

Hace bastante tiempo leí una reseña de Las hermanas Makioka de Junichiro Tanizaki que me dejó muy buena impresión, además de que desde hace unos años que me intereso por la literatura oriental.

Resumen: La familia Makioka fue una de las más conocidas y prósperas de Osaka a principios del siglo XX, pero a finales de los años 1930s poco queda ya del antiguo esplendor. El señor Makioka, muerto desde hace casi diez años, dejó tan sólo cuatro hijas – Tsuruko, Sachiko, Yukiko y Taeko –, de las cuáles las dos más jóvenes – de treinta y veintiséis años – siguen sin haberse casado, lo que preocupa gravemente a la familia.

Opinión: Como en muchos países europeos, la tradición japonesa dictaba que las hijas debían casarse por orden de edad. A lo largo de la novela seguimos todos los intentos de la familia que, a través de conocidos, reciben propuestas de potenciales candidatos. Y es un caso difícil, Yukiko

tiene mucho en contra. Ya pasa de los treinta años, una edad muy avanzada para casarse en aquella época, por lo que la gente sospecha que tiene algún 'defecto'. La verdad es que la familia Makioka, cegada a su propia pérdida de poder y estatus, había rechazado muchos buenos partidos por creerlos inferiores a ellos. Además, Yukiko tiene una peca en el párpado, que sólo a veces es visible, que horroriza a algunos hombres que buscan una cara pálida y sin ningún tipo de 'imperfección, por lo que deberá someterse a tratamientos hormonales. Finalmente, y para gran vergüenza de la familia, está el 'incidente de los periódicos'.

Se trata de que su hermana pequeña, Taeko, a los diecinueve años se fugó con un chico de su edad, Okubata, al no querer esperar a que su hermana mayor se casase. Ambas familias, opuestas cualquier tipo de enlace, lograron rápidamente poner fin a ello sin mayores daños que un artículo en la prensa.
Si no tuviera con tener que casar a Yukiko, Sachiko descubre al principio de la novela que Yukiko se está volviendo a ver con Okubata a escondidas.
Esta novela se podría asemejar a las novelas de Jane Austen, pero situadas en el Japón de entre-guerras. Tanizaki también tiene la vocación de mostrar hasta los mínimos detalles de la vida íntima, en familia y en sociedad de los personajes, sin utilizar un estilo tan mordaz como el de Austen. La historia transcurre a lo largo de varios años – de hecho termina en 1941 con Japón a punto de entrar en guerra – en los que el lector puede presenciar los distintos rituales y costumbres japoneses: desde ritos a los muertos, la ceremonia de año nuevo, el festival de las muñecas, la fiesta de los cerezos en flor, etc. Pero sin duda al que mayor atención presta es a toda la parafernalia relacionada con concertar un matrimonio. Hay un montón de premisas, de pasos previos antes de que ni siquiera el posible novio y la posible novia se conozcan, hay reglas que obedecer (por ejemplo, qué tipo de kimono ponerse) y comportamientos que son esperados, y
Los cerezos en flor. 
si no es así es muy probable que se cancelen las negociaciones. Sí, es lo que son, negociaciones. Es normal y está perfectamente aceptado que las familias contraten a detectives privados para que investiguen al novio/novia y su entorno. Por ejemplo, algo que es motivo de cancelar cualquier compromiso es encontrar un historial de enfermedades mentales en la familia. Por supuesto, también
están a la orden del día la dote de la novia, pero también el futuro del marido en su trabajo y sus ingresos.
Pero ahora mismo Japón se encuentra entre dos mundos. Por una parte, tiene una tradición y cultura muy potentes y fuertemente arraigadas al subconsciente de sus habitantes. Por otra, poco a poco el modo de vida occidental se está infiltrando en el día a día, llevando nociones más modernas y menos estrictas sobre el comportamiento en sociedad. Eso no sólo afecta a la familia Makioka – algunos de sus miembros creen que es su deber mantener el honor de la familia, que aún cree que tiene importancia en Osaka, respetando todas las tradiciones – si no también a sus relaciones con los demás.
La que más está afectada es Taeko, la menor. Al ser la más joven no presenció el esplendor de la familia en pleno apoteosis. Por ello se cree con libertad para trabajar, una terrible ofensa para su familia, haciendo muñecas tradicionales japonesas y occidentales que tienen un éxito fulgurante. Pero lo que más asusta a los Makioka es la libertad que se toma en cuanto a sus relaciones con los hombres. Ésta es otra forma de rebelarse ante la terquedad de su familia a amurallarse en sus costumbres para aislarse de un mundo que en realidad se está desmoronando. Aunque los eventos históricos sólo se tratan por encima – realmente sorprende ver la ligereza con la que tratan la Segunda Guerra Mundial y la Alemania nazi, claro que eran aliados, y seguramente se acerque demasiado a la realidad – se percibe el ambiente de cambio, la amenza de occidente y de la guerra. 
Pero para mí personalmente Taeko es un misterio. Quizás es porque la historia está principalmente narrada a través de los ojos de Sachiko, que es mucho más conservadora, y sus preocupaciones sobre el qué dirán. La otra hermana, puede ser particularmente exasperante. Se trata de una persona extremadamente reservada, que en muy pocas ocasiones habla de sus sentimientos incluso con la familia más cercana, y que además es my tímida, aunque cuando se llega a conocerla puede ser una mujer alegre y vivaz. Pero tiende mucho a encerrarse en sí misma, para huir de qué hay que descubrirlo, quizás de su destino inevitable.
La que más me ha gustado es Sachiko, cómo cambia a lo largo de la novela, cómo su relación con cada una de sus hermanas se transforma poco a poco.

En conclusión, Las hermanas Makioka es una novela lenta, no ocurre mucho, pero se disfruta en los detalles, en una narración lenta y pausada. El estilo me ha parecido bastante sencillo aunque no directo– quizás por la traducción, aunque no pueda quejarme mucho de ella –, distinto en cierto sentido. Es buen un retrato de la alta sociedad japonesa en un momento en el que sus valores milenarios se tambaleaban, y un clásico de la literatura del país. 

6 comentarios:

  1. A mi me has convencido!! =)

    Yo también hace tiempo que vengo interesándome por la literatura oriental y la verdad es que esta novela me ha llamado mucho, además esa comparativa con Austen.... ains, sabes como ponernos los dientes largos! jajaja!
    Creo que lo que mejor se les da a los japoneses es precisamente la narrativa pausada que parece que no cuenta nada pero dice mucho...
    En fin, otro más para la lista (de Reyes... jejeje)

    Un abrazo!

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    Respuestas
    1. Jajaja sabía que os pillaría con la comparación a Austen! Realmente es un libro que merezca la pena, espero que consigas leerlo :)

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  2. Vaya pedazo de reseña!. He disfrutado leyendo, como tú has disfrutado el libro, de forma pausada. Una más a la que la literatura oriental le va "comiendo la oreja". Me lo apunto, porque además no lo conocía.

    Gracias y un saludo!

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  3. Vaya, que buena pinta tiene la novela! Me sonaba el nombre, supongo que de verla en alguna librería, y me gusta leer novelas chinas y japonesas de vez en cuando para conocer un poco más de esas tierras tan lejanas, así que tras tu reseña me la apunto para el futuro!
    Y claro, como dice Magrat, esa alusión a Austen.... jejeje, es inevitable que capte nuestra atención!

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