Hace poco me recomendaron ver esta película y, al no ser pocos los que lo hicieron, decidí verla en cuanto pudiese.
Barry Lyndon (1975) es una película que mezcla aventura y drama, dirigida por Stanley Kubrick. La verdad es que me sorprendió bastante que Kubrick hubiese hecho una película histórica, basada en la novela de William Thackeray (autor de La feria de las vanidades)
Sinópsis: Redmond Barry vive con su madre en un pequeño pueblo de Irlanda. El joven está profundamente enamorado de Nora, y por ella se batrá en duelo con el oficial John Quinn. A causa de este incidente, deberá irse de su tierra natal y acabará alistándose en la armada. Así pues, Barry participará en la guerra de los Siete Años y esto le llevará a vivir muchas aventuras.
Este no es más que el resumen del principio de la primera de las dos partes que dividen la película. (Sí, es larga, dura poco más de tres horas)
Opinión: Creo que, para analizar bien esta película, se han de analizar por separado las dos partes. Pero antes, empezemos por los personajes.
Ante todo, yo creo que la mayoría de los personajes son bastante planos (es decir, que evolucionan poco a lo largo de la obra). Barry Lyndon, el personaje principal, es el único que quizás muestra un cambio. Ciertamente, cada vez, a medida que le ocurren desgracias y descubre la cruda realidad del mundo en el que se encuentra, se va volviendo más naif. Sin embargo, es un personaje extremadamente simple, es un sinvergüenza pero por el que no se puede sentir desprecio, en parte por la sosísima interpretación de Ryan O'Neal. En cambio, hay algunos personaje secundarios, sobretodo el maquiavélico reverendo Runt, que nos muestran con más claridad la realidad social de la época.
El sonido, es horrible en versión doblada, así que recomiendo que se vea la película en versión original subtitulada, y así poder "disfrutar" del acento británico y/o irlandés de algunos de los actores. No obstante, la banda sonora (el tema principal es una versión de la Sarabande de Haendel), compuesta entera por música clásica, se acorda perfectamente con las situaciones y el ambiente y vale la pena prestarle atención.
Pero si algo hay que poner en relieve de la película es su fotografía. Es magnífica, y hay algunos momentos en que... en fin, tiene unos planos increíbles.
El vestuario también es impresionante (sobretodo a partir de la segunda parte) y que, si apreciáis la moda de esa época (Rococo & Cía) os quedaréis casi igual de maravillados que con María Antonieta.
La primera parte de la película contiene más acción y puede parecer más entretenida. En efecto, en ella se narran lo acaecido a Barry y cómo llegó a obtener su fortuna. Sin embargo, a mí me parece la más "accesoria", la parte más simple en las que se limitan a contar una serie de peripecias del protagonista durante la guerra. Sin embargo, la segunda parte es mucho más interesante. Si bien es cierto que es mucho más lenta que la primera (aunque, para ser sinceros, a mí me aburrió más la primera que la segunda parte), esta es mucho más dramática y contiene el verdadero retrato de la alta sociedad del siglo XVIII. En la historia de Barry Lyndon se nos transmiten las absurdas reglas de etiqueta, los prejuicios, los juegos de poder, pero sobretodo la importancia que tenía en aquella época la provenencia de uno. Es decir, por mucho dinero que se tenga, uno nunca podrá formar parte de la nobleza si no ha nacido noble y, al mínimo desliz, será marginado por la sociedad que antes le admitía, aunque sólo fuese por puro oportunismo.
En conclusión, Barry Lyndon es una película más o menos entretenida, con una fotografía y vestuario impresionantes (por algo ganaron el Oscar en estas dos categorías), con una trama aceptable que mejora y se complica a lo largo de la película. ¿Tenéis una tarde libre y os apetece ver una película bastante convencional de Stanley Kubrick? Ved Barry Lyndon, no os decepcionará y vuestra vista y oídos quedarán más que complacidos. Pero, para películas sobre el arrivismo durante esta época, más vale ver Moll Flanders (la versión de 1996 o, a poder ser, la de 1965)
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