Howards End

No, no es un crimen mirar de vez en cuando películas como estas. Seguramente, a primera vista la mayoría de nosotros se diría "uf, qué tostón de película". 

Lo peor o mejor es que tendría parte de razón. Howards end no es una película de acción, ni mucho menos, pero no por eso deja de ser muy recomendable. 

Dirigida por el célebre (y en mi opinión, excelente director de dramas de época) James Ivory,  Howards End (1992) trata de la vida de las hermanas Helen (Helena Boham-Carter) y Margaret (Emma Thompson) y de cómo sus vidas van a tomar rumbos opuestos al encontrarse con la familia Wilcox y al joven y desafortunado Leonard Bast. En esta película, situada a principios del siglo XX en Inglaterra, se encuentran los tres grupos sociales predominantes: la aristocracia, la burguesía y los trabajadores. De esto surge una historia conmovedora y muy realista sobre la época, de la que se deduce una crítica veraz de la manipulación, del abuso y opresión de las clases dirigentes a las clases trabajadoras. 

La película es una adaptación a la novela de mismo título escrita por Edward Morgan Forster.

De esta película se pueden destacar varias cosas:

-La minuciosa, precisa y muy adecuada ambientación histórica. No sólo por los decorados, vestidos, lugares y demás, si no porque las mismas palabras de los personajes revelan su condición social y la forma de pensar de aquellos tiempos. 

-Esto me lleva a lo siguiente, la magnífica interpretación de todos y cada uno de los actores, pero especialmente Emma Thompson, que lleva a cabo a la perfección la transformación que sufre su personaje a lo largo de la película, y por lo que se llevó un merecidísimo Oscar.

Lo único, quizás, que se podría decir en su contra es que a veces el ritmo de la película es demasiado pausado, lento. Seguramente así era el libro, pero hay momentos realmente pesados, de poco interés, y que seguramente aburrirían a la mayoría. Hay que decir sin embargo que cada una de las escenas aporta detalles muy significativos sobre la psicología de los personajes, por lo que son bastante interesantes, desde este punto de vista. 

En conclusión, yo no recomendaría esta película si queréis ver una película con ritmo y divertida. Howards End es, sin duda, una película que merece verse si lo que el espectador quiere es una película muy bien hecha, quizás algo lenta, y que propone una intensa reflexión sobre las relaciones entre clases y su influencia sobre las personas.